Una persona cansada de un scanner antiguo porque según ella solo escaseaba en blanco y negro se ha desprendido de el, yendo a parar a mis manos. Solo he tenido que bajarme unos controladores para tener un scanner normal que por supuesto escanea en color. Ahora tendré menos inconvenientes en digitalizar bocetos. Eso me hace pensar en que podemos llegar a tener recursos muy cercanos y que estamos desperdiciando su potencial por ignorancia. Ese es mi caso con el photoshop. Inaugurando el escáner aquí dejo el boceto de la mesa desde donde realizo mis “cosillas” No había terminado “Lo que le falta al tiempo” de Angela Becerra cuando empecé “La ciudad sin tiempo” de Francisco González Ledesma. Ha Raquel le ha hecho gracia que pusiese el reloj despertador encima de los libros por la relacion con los títulos. Los dos libros han sido cajas de sorpresas debido al argumento que acaban tratando.
El de Ángela empieza como novela rosa y luego te golpea como las novelas ahora tan de moda (y que me gustan) de sectas secretas de creación ancestrales.
El otro que tiene pinta de novela histórica o novela negra, no deja de serlo pero con vampiro incluido.
He ido a destajo para leérmelo porque hoy quería ir una Tertulia donde era estaba invitado, Enrique Moriel (seudónimo de F.G. Ledesma, en esta ocasión). La novela me la he ventilado en menos de una semana, cosa que no hacía en muchísimo tiempo debido a lo que me ha cautivado, y por intentar ir a la tertulia con lo máximo leído. El escritor me ha parecido encantador y modesto, y tenía anécdotas a miles por contar. Estoy seguro que todos los presentes hemos disfrutado muchísimo de su compañía.
El de Ángela empieza como novela rosa y luego te golpea como las novelas ahora tan de moda (y que me gustan) de sectas secretas de creación ancestrales.
El otro que tiene pinta de novela histórica o novela negra, no deja de serlo pero con vampiro incluido.
He ido a destajo para leérmelo porque hoy quería ir una Tertulia donde era estaba invitado, Enrique Moriel (seudónimo de F.G. Ledesma, en esta ocasión). La novela me la he ventilado en menos de una semana, cosa que no hacía en muchísimo tiempo debido a lo que me ha cautivado, y por intentar ir a la tertulia con lo máximo leído. El escritor me ha parecido encantador y modesto, y tenía anécdotas a miles por contar. Estoy seguro que todos los presentes hemos disfrutado muchísimo de su compañía.